Shadowfever - Karen Marie Moning

Quinto y último libro de la saga Fever, aún inédito en español. Más o menos a la altura del primero (no sabría decir si el primero me gustó más por la novedad o este por ser la conclusión) y el segundo, mejor que el tercero y mucho mejor que el cuarto. La autora sabe arreglar algunos fallos de las anteriores entregas y nos da más páginas, pero sin que se haga largo. El ritmo es constante, hay un par de giros que no me esperaba y cierra la historia bien. No es un final grandioso, ¿pero acaso existen los buenos finales? Spoilers a partir de ahora.

Empezamos exactamente donde Fiebre Anhelada nos dejó: con Mac y la persona que acaba de matar. Barrons. Supongo que todos esperábamos que fuese él, pero sigue siendo un shock. Tras llorar Mac (y yo a punto), cagarse en Ryodan (yo también) y en sí misma, se alía con Darroc. No me lo esperaba, para nada. Pero me encantó. Buen giro, y aunque su relación termina de forma un poco... abrupta, fue bonito mientras duró.

Pero Barrons vuelve. ¡Aleluya! Me lo imaginaba, porque la serie sin Barrons no es nada, pero tampoco le ha quedado muy cutre el regreso. A partir de este momento, conocemos más de Barrons que en los 4 primeros libros juntos, y también conocemos a algunos de los hombres de su grupo. Lo malo es que casi siempre se limitan a hacer un par de chistes, y solo oímos y a Ryodan a Lor. Mencionan a otros, pero vamos, que podría sacar muchas cosas de estos tios y los tiene de monigotes. Una pena.

Las sidhe-seer aparecen menos, gracias a Dios. Son un coñazo, unas inútiles y cada vez que alguna habla me duermo. Rowena apenas aparece, y cuando lo hace habla lo justo, así que yo encantada. Además, su historia con Alina y su final (y como intenta engañar a Mac) me encantaron, así que bravo por la autora.

Dani también aparece menos, pero las pocas veces que sale son un coñazo. Sinceramente, es el personaje más sobrevalorado de toda la saga. Aunque tengo que admitir que me ha gustado que fuese ella quien matase a Alina (aunque fuese cosa de Rowena), y la consiguiente charla de Mac con Barrons. Aun así, Mac es una moñas y hubiese agradecido menos Dani. Al menos en inglés ha sido más gracioso, ya que su forma de hablar me ha parecido cuanto menos curiosa. El slang no es nada que no haya oído, pero cómo pronuncia sí.

Toda la historia del rey Unseelie es una paja mental, y la del cadaver de la reina/concubina también. Lo del rey al final lo he entendido, lo de la concubina no estoy segura. Me parece que la autora no sabía cómo explicar del todo qué era Mac y se ha montado una película indescifrable en la cabeza. Y Christian MacKeltar me tiene intrigada también, con eso de que se está conviertiendo en principe Unseelie. Pero lo de V'Lane/Cruce sí que me ha gustado, y no me lo esperaba para nada.

Otro de los contras de la autora que me saca de quicio: los padres de Mac. Es ridículo la de tiempo que pasa contando lo geniales que son sus padres, y la de páginas gastadas con chorradas. "Mi mami es la mejor y hasta a Lor y Ryodan les encantan sus tartas. Ahora voy a decir que mi papi, el mejor abogado de un pueblo enano perdido en Georgia, te ganaría en un juicio. Y que sepas que mis papis son super carismáticos y hasta los malos-malotes están enamorados de ellos.". Cariño, tus padres me importan un pimiento. Y que Ryodan, Lor y Barrons llamen a tus papis por su nombre de pila, digan que son geniales y se peleen por sus tartas es... patético. Tendrían que haber hecho que Darroc los matase, y así añadir dramatismo y ahorrarnos esas escenas tan patéticas en Chester's con los macho-men de Barrons.

También decir que me encanta Chester's. La gente rara que anda por allí, los macho-men de Barrons, las locas comiendo unseelie y gritando "¡Nos vemos en Faery!"... No me importaría ir un día ;)

Otra sorpresa fue el hijo de Barrons. Sale poco, pero a mí me dio penita. Al final consiguen encontrar una solución, pero aun así me cuesta creer que tras siglos, no, ¡milenios!, buscando una solución, cuando Mac no la consiga Barrons se quede como si nada. Pero bueno, se lo paso. Tampoco ha estado del todo mal (aunque no ha sido nada del otro mundo) la forma en que han arreglado el problemilla de que Barrons sea inmortal y Mac no. Parece un poco "truco sacado de la manga en el último momento", pero tampoco me ha parecido que quede fatal. Así que se lo vuelvo a pasar.

En general, muy buen libro. Las últimas 100 páginas son un poco... liosas, y sí que baja un poco el ritmo, pero es más que decente, sobre todo la primera mitad. Es un buen final para una serie entretenida. Sólo espero que la autora se anime a hacer algún otro libro con Barrons y Mac (y sin sus padres y Dani) en el Dublín postapocalíptico.

Y aquí dejo la canción que suena siempre en Chester's:

                                              Don't you wanna fuck me?
                                             Don't you wanna live forever?
                                             Don't you wanna fuck me?
                                            Think we could be good together.