El lunes me lo compré y empezé a leerlo a la noche. "Va, un par de capítulos y a dormir, que mañana hay que ir a la Uni". Estuve hasta las 4 de la mañana leyendo, me leí casi la mitad del libro y lo dejé porque 4 horas más tarde tenía que levantarme para ir a clase, que si no allí seguía hasta terminarlo (me lo leí en unas 24 horas). Vamos, que me encantó de principio a fin.
La protagonista, Mac, cuenta la historia en 1º persona. Cuando hay que ponerse serios y hacer una descripción con fundamento, lo hace. Cuando tiene que hablar de forma más vulgar o juvenil, también. A veces puede ser un poco petarda con eso de vestir siempre de rosita y parece que teñirse el pelo es un trauma, pero por lo demás, no tengo quejas.
Me encanta la tensión sexual no resuelta que se respira. No hay escenas de sexo en esta primera parte, aunque casi, pero podemos ver esa tensión entre Mac y Barrons, incluso V'Lane.
Nos van presentando el mundo Fae muy poquito a poco y Mac pone nombres fáciles de recordar a los monstruitos, así que no hay mucho lio con eso. Además, el que no haya vampiros es un respiro. También me gusta que esté ambientado en una ciudad como Dublín y el barrio de Temple Bar. ¿Soy la única hasta las narices de pueblitos donde Jesucristo perdió la alpargata?
El final queda bastante abierto, y es que este libro no ha sido más que la introducción de lo que va a pasar, una presentación para que nos familiaricemos con el mundo Fae y sus personajes. Pero sigue siendo bueno !y engancha de lo lindo! Tanto, que cuando aún me quedaba la mitad del libro por leer, sabía que ese mismo día iba a terminarlo y querría más, así que me compré el segundo y tercero. Y ahora que me he acabo el tercero !solo quiero más!
Muy recomendable. Y si no lo digo reviento... !Barrons forever!
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